sábado, 10 de noviembre de 2012




 Todavía me quieren conocer, un halo de inquietud...

“pero nada es estable,¿ nada permanece ?”

Tras tres años y meses de regreso al terruño, este maestrico que ha tenido la suerte de vincularse y   beber de las fuentes del movimiento vecinal en mi estimada Catalunya, hace balance de su retorno  a la Melilla que le vio hacer diabluras y aportó su arraigo a la tierra y a sus olores de infancia y juventud.

Me costó una dura depresión no apostar por la política institucional de mi Santa  Coloma querida, allá por la mitad de los ochenta, me costó no subirme al tren, pues mi responsabilidad me hizo no aprovechar esa estación que otros con menos sentimientos y fondo aprovecharon. Mi lectura a toro pasado es que no me pesa ,pues hubiese durado menos en un Pleno que un euro en manos de Bankia y sus Cías y permítanme un  triple! jejeje!, no habiendo para más.

 Siempre he optado por lo difícil, comprometido, nada ventajoso, uniéndome a las causas que han buscado un desenlace acorde con mis tempos y necesidad de búsqueda de las razones y porqués que me motivaban a ir de frente sin opciones por principios a disfraces y ofertas  del momento. Siempre he dudado y he mantenido el interrogante de si era o fue lo correcto  dando de mí y de mis compañeros lo que en libertad de conciencia me venía en necesidad. Algunos interrogantes por suerte han quedado despejados y lo agradezco, no sabiendo bien  y claro a quien.

 Haber prometido y volver a la tierra fue y no lo creían una necesidad, una realidad  en la que transcurro, a veces desde las barricadas y la solitud del que mea o micciona en finolis de rigor fuera de la norma y la imposición que tanto ata a tantos y anima a avanzar a los contestatarios en el  marco que nos encoje y llama a rebelar.

El contacto y el trabajo durante más de dos décadas con mis vecinos, mi profesión vocacional de docente, mis neuras a plasmar en  hechos del hoy y pendientes mañanas, me han hecho y así lo siento y expreso un ser privilegiado e incomprendido en la llegada y en la actual estancia, pero no me pesa, me agacha, me subleva, me excita, me llama a seguir siendo  este ciudadano contrapunto que a veces tanto se sale de líneas editoriales , equivocadamente  no entendido o consentido por los que manejan el pulso y el poder de controlar a golpes de timón realidades que  me saben a injusticia, acomodo y  aceptar deudas mentales que no reconozco a superar.

El trasiego mundano se hace más llevadero desde la proximidad a  un irremisible final e incógnita que no me desespera, pues vendrán, hay otros que  comparten la negritud y diferencia de la oveja que en su grupo opta por avisar de los lobos que merodean, lobos que plagian papeles diseñados y que anulan sus voluntades de ser y aspirar a lo que han aceptado se les secuestre, apostando por lo fácil y de respuesta inmediata cargándose de sin razones  y viendo en el critico y diferente, enemigos de sus propias inestables convicciones a las que no harán  públicas pues eso, ¡ Gallardo ciudadano ! no interesa, no se lleva, no procede y tantos noes de más que me resisto a enunciar, pues el mensaje igual no tiene pactado el código , la simpleza de considerarme sembrador de terrores a quien solo aspira a remover conciencias, por efectos de la propia que me intranquiliza y aspira a calma, a consecución de regalos incumplidos que sobrepasan lo personal ,pues  me diluyo a voluntad en aquello que necesita y me hace formar parte como grano del amplio y necesitado mundo de saciados  en comprender que no somos más que aves de paso que deben de alimentar  y luchar contra todo lo que nos anula y   pretende aborregar.

 Hoy mi Heredia, mi Víctor pampero e indígena universal, me ha acompañado, recordándome aquellos “Soldaditos de plomo”, el más que actual “Sobreviviendo” que nos protagoniza este presente, diciéndome en añadido que es cómplice de mis pasiones y tropiezos, pues así se lo más que auguró el inca viejo  de orgulloso arraigo andino, así  me lo expresa él y yo lo refiero haciendo uso de mis sentimientos, emplazándole para otros menesteres, con el aval de mis hados y sus dioses no exterminados, pues como canta León, mi Gieco del alma, existe la memoria, y ella vive, ella habla.

 Un pequeño inciso producto de un puntazo espontáneo que reclama su papel.. ¿ saben ustedes, mercedes y visitantes de alquerías aquél que diu?, pues... si lo saben no cabe contarlo, eso si que lo disfruten y mi recuerdo al genial Eugenio.

¿Todavía no me conocen?, suena a pretencioso, suena a soberbio,...y es que quien se considera genio de sus contradicciones y luces encontradas, promete seguir siendo uno mismo, pasarlo mal y buscar en esas incomprensiones de interés, el motivo para seguir reclamando mi rol y mi apuesta por  esos contrapuntos que a algunos les hace dudar o alabar, temer o gozar de otras dimensiones .

 Cada cual  decide su camino, cada uno es  lo que vive y lo que sueña, reservándome el derecho a decidir por donde cojones me aproximo a realizarme como algo más que materia por mucho que consienta sin opciones a consumarme en esta tierra que me vio parir y aceptar mi regreso, pese a quien pese y alegre a corazones que me consta.

 En acabando, que me apremia la salida para el encuentro en el bosque de las palabras tolkianas  donde hoy me toca, inspirarles alma, claro nada terrenal, de cosecha propia.

 Mucha salud, que es el tesoro que nos hará  disfrutarlo todo lo poco  que da sentido a nuestra razón de existir.




 Pedro Gallardo, Ciudadano

No hay comentarios:

Publicar un comentario