La copa de Vino y sin enterarnos de la copla
La copa de vino es el concepto facturado, la copa de vino es el titular de la movida de asistentes en número desconocido, la copa es la excusa para la rendición de subditajes, cucamonas, garantoñas, despelote gestual y baboseo. Los adeptos al Massa tenían que celebrar, festejar, llenar su tripica de las viandas al gusto, del surtido a degustar o a degullir cuando no te miran.
El vino y la copa, la copa y el vino no tienen la culpa de esta mi referencia, desconocen costará 17850 euracos exactos, para que cuadren las cuentas. Don Miguel actuó con celeridad accidental , con su solvencia y elocuencia dando cumplido pago a Hostemel, que me suena a hostelería melillense repetida en multitud de eventos de pleitesía y doctrinal y costumbrista mamoneo.
Allí se pudieron saber, catar, ambientar por efluvios de sus propiedades organolépticas, allí su aroma y cuidado de no mancharse, su bouquet enrisotado, su gusto y regusto dándole ritmo al cuerpo, del líquido elemento y de tanto encorsetado, embarrigado y achochado testigo de semejante encumbramiento.
No se si en ello en paquete de servicio entra el sommelier, el catador o el ampelólogo de rigor, pues aquí todo se hace con mesura, planificación y apercibimiento de garantizar los nobles efectos. Cierto es no trascendió pues tan selectivo, tan sibarita que no hubo lugar a conflicto Mondovino, para tranquilidad de mi admirado Nossiter, cineasta fino.
No, no aspiro con esto, cortito y necesario para calma de mi neuras, aspirar a ejemplarizar la poesía baquina por mucho que me guste Abu Nuwas, a quien en sueños conocí en mis sueños de visitas a lo taifal, aquí ahora real, en Melilla programado, cuantificado, pues el cuerpo pide marcha y el protocolo viste a la mona de seda y a los que nos representan y gobiernan, de practicantes de una ley no seca, si puede ser mojama, más que mejor.
No hubo, no hubo que hacer cola con foto exterior de impacto comedido y estudiado en este pasado 9 de Julio, y mi menos mal de que no coincidiese con el 17 del mismo.
¿ Cuántos, cuantos Presidente, accidental o sin accidente, piensan hacer de lo mismo?.Mientras pienso en esas cuarenta o más de familias en el umbral de la pobreza que hubiesen hecho su Julio o Agosto... pero claro ellos igual no reunían las condiciones, el traje de rigor y esos complementos, pues de todas formas el guión estaba más que escrito.
Qué decir que no digan otros conscientes conciudadanos. De pena, de vergüenza y el menos mal que se inspiraron en la reiterada austeridad presentada a Don Mariano, que sino...cinismo, hipocresía, vanidad y el ¡ a mi no me engañáis!. Con lupa pues, con luz y taquígrafos y a no pasarles ni una estos vividores que todo lo justifican o malversan.
Un brindis de denuncia y en libertad y a seguir pensando en tropelías y como marcar a díscolos e indignoflautas, pues yo de momento sigo siendo amigo de Hamelín y de ti también Mehamedin, no te me enfades.
Me parece muy buena reflexión, Pedro me gusta que gruñas en tus escritos, me gusta que tu florida escritura sirva de denuncia de las injusticias, creo que es lo que se espera de un articulista progresista, pero mi opinión no tiene demasiado valor ni periodístico ni literario, aunque espero que amistoso si la tenga.
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