Pues si amigos, yo no lo soy tanto y no me siento frustrado,
malogrado, inseguro, necesitando de escribir lo que no es mío, como otros, como
otro, el Diputado. Ha pasado la
cuarentena de días y el tránsito de un
año a otro, desde aquél “ Pobre de ti,
frustrado Diputado ”, artículo donde me hacía artífice de una desilusión,
un chasco, un desengaño, sinceramente no esperado ni deseado.
Y es que la
originalidad , la creatividad no es para mi un plagio no detectado pues he
visto esto en otros sitios, teniendo la suerte de recordarlo, sin complejos ni
inris. Es que los melillenses no somos, decía entonces, acúmulo de la
nimiez e incultura; es que hoy día
resulta muy fácil, internear y remover de aquí para allá, haciendo que funcione
el botón derecho ratoneril y el pegado de rigor y cumplida causa. Es que no has respetado, no respetas a los
medios que te dan canchilla, a sus profesionales, vendiéndonos la moto,
socavando la integridad y confianza en
tu persona depositadas.
Ciudadano Diputado Abdelharrim Mohamed, representante de
nuestro pueblo en la Asamblea de Melilla, me has decepcionado y lamento que el
espíritu navideño universal no accediese a mi petición de que te impregnase de
honestidad intelectual y que te predispusiese a seguir ejerciendo de escribano
sensible, comprometido, humano, pero siendo tú y expresándolo con fuerza y
profundidad, con conciencia propia y no añadida.
Tus dos últimos artículos publicados en prensa escrita y
digital, son más de lo mismo, pues parece te es fácil, accesible y claro,
vende. Vende imagen de comprometido, preocupado, sensible y no soy quien para
dudarlo, pero ¿ necesitas hasta las comillas y las comas ?, ¿ qué queda de tu
reflexión interior expresándola como corresponda a tu real pluma, estilo y
limitaciones nada reprobables , qué te queda de auténtico?,
pues, no, no vale todo.
“El legado de Gandhi:
la no violencia”,
sin duda es un tema apasionante, necesario de situar pero para ello, me cojo
tres Mensajes del Secretario General de la ONU Ban.ki-Moon, 2.007,2.009 y
2.011, troceo, uno arriba ,esta en
medio, aquella más abajo y le pongo la
guinda del texto de “Educabolivia”
de final. El resultado, un articulazo que ve la luz, un autor que se siente realizado, tristemente autoengañado
y que no lo reconoce, un Diputado que se moja, que opina, que a lo hecho, pecho, que yo soy bueno, muy
bueno... y así voy haciendo de lo impermisible y antiético, una norma, una
normalidad, para mi, un fiasco. Pero
claro, el tiempo todo lo borra ??, ¿ y mientras
tanto ?.
Claro, claro que el legado del Mahatma, del “ Alma grande ”, ha de iluminarnos, pero siendo paladín de la
violencia pacífica, no pienso se alegrase de tus contrasentidos, palabras,
hechos, incordura, inseguridad de lo que
tienes que responderte a ti mismo, a lo
que representas, que se merece respeto y aprecio, superando egoísmos que te pesan.
No, no me es fácil escribir
este artículo, pero mira por donde, resulta que mi testarudez, porfía,
tenacidad me superan. Hay cosas que no
obvio, hay momentos en que no paso página, hay situaciones que merecen respuesta, luz y
honestidad.
Creo que tu, mi admirado profesor García Fajardo, de
referencia tan recalcitrante en muchos de tus últimos, merece, al menos se le
nombre como autor material, intelectual, de sus dichas y desdichas, aciertos y
ejemplares pensamientos, “ suyos” y a compartir sin silenciarlo.
A Hércules
Poirot, Conan Doyle , Clouseau , Gadget, Layton y Dick Tracy, gracias por
ofrecerse , gracias en algo que era tan fácil de ver, que no merecía la pena,
su inestimable servicio.
Mi salud y deseos de
que suponga un “ hasta ahora y un mañana
diferente ”, pero, no depende de mi... pudiendo quedar odio, recelo,
resentimiento o “simplemente reconocer
que ese no era, no es el camino”
Pedro Gallardo,
Ciudadano