Estrecheces, realidades , no salvándose ni mi amigo Wyoming

La unión de pensionistas  y jubilados de España, expresa al Gobierno su malestar y el mío desde aquí, por cebarse con ellos y como último de otros primeros por llegar, el medicamentazo que “ mata lentamente ”, Sra. Mato, que para el ano ni hemoal se salva.

Esta crisis no es local, esta crisis no con okal, pues mis amigos ingleses  celebran con amargura el setenta aniversario de un desmontado Estado del estar. Mis catalanes de media vida con ellos se pronuncian a favor de la independencia, siendo mayoría,-entiéndase de los encuestados-, pues cada vez tengo más claro que separa la realidad económica, no llegar  a fin de mes, ver los fallos en el otro, ver el futuro sin color y los colores difuminados por oscuridades contagiadas.

El banco de una España nada independiente, alerta de nuestro hundimiento en una recesión imparable donde lo macroeconómico  nos es cada vez más adverso, esquivo y jodidamente amante de lo nebuloso en galopancia. Los Modýs, Ficht y Cía , recalifican, evalúan desatándonos el esfínter evacuatorio del ¡ cagase y mease ! , pensando en el ahorro del papel de higiene  y Dios sabe y a padecer el IVA al alza nada premonitorio.

Los inmigrantes sin papeles que enferman siendo o no cristianos, desprotegidos y sus microbios sin controlar. Es un contexto de deudolandias , de Eurovegas que aspiran  el humo del buen fumar, a lo que Esperanza no se niega ni Botella la abandona y el todo sea por la causa. La archiconocida prima de riesgo se encuentra incómoda en este teatrillo y aspira a debutar en marcos de más  jactancia y fermosura.

 La UE no sigue humillando y Mariano traga viendo como se le impone se acabe la deducción de vivienda, una de las consecuencias y exigencias entre tantas del “rescate”. 456 medicamentos casi familiares sometidos a aportaciones pues nuestras dolencias soportables han de acoquinar. Amenazante aparece alejándose del horizonte el centimazo de los hidrocarburos al que llaman “verde” en contraste con mis  rojuras. Mientras las gasolineras ven como se reduce el precio del barril casi en un 30% pero ellos sin inmutarse para colmo de mis cataplines.

 Almunio aclara que Europa, los eurocentro, no dan consejos en balde, pues recomiendan ellos generosos y displicentes, para que seamos vinculantes y nos autobliguemos, pues sino, si somos malos chicos ya lo harán ellos.

La luz en este inicio de Julio nos  dirá que sube un 4 o 5% y seguiré añorando el  kinké de la abuelita, igual a recobrar como botijo hispano refrescante. Mis guardias civiles se me quejan de que sus pluses peligran si no hay incremento de multas por mucho que se haga el longi el Director estamentado.

Y mi carta a Doña Rita, a mi Barberá en contraalma, seguro llegará demandándole unos de sus “Wuitron” pa mi compañera, de esos que le sobran en el armario conocido, clamándole me otorgue ese sueño por raíces valencianas y paella dominguera a degustar.

 Y es que la vida, querido Arturo nos pone rayas rojas, es que la pobreza no puede institucionalizarse, es que entiendo y ccmparto tus momentos de pesimismo y por ello mi aliento y abrazo, pues de momento me los administro yo. Y en despedida, pues me recorto a voluntad en prepartido, mi  nones al magnate Sheldon Adelson y su Eurovegas a esfumar, pues uno lucha contra el tabaco y tanto impuro y mi despedida casi conseguida a Nico y la Señora Tina, que aquí uno se queda con su EPOC. Y como siempre mi sed buenos, aunque a alguno habré de perseguirle sin que lo sepa,¡ jeeeeee!

 El mundo está lleno de presos de sus  irreconocibles conciencias. Pero eso lo dejaremos para otros deslices, lamentos y placeres de la amada escritura.

 Pedro Gallardo, Ciudadano