¿ CELEBRAR,HOMENAJEAR ?, RECORDAR, EXIGIR...

“ Las no respuestas, la espera sin inicio, palabrería, hipocresía, desvalida y sin alma, ¡ pobre Carta Magna !”

Treinta y cinco años de la aprobación en referéndum del texto constitucional por amplia mayoría y previo consenso de mínimos que nos enmarcasen en el caminar de la ilusionante democracia, en su profundización y desarrollo, en su aplicación con hechos, en la igualdad, justicia y libertades para todos, ser ciudadanía.

No tengo nada que celebrar ni homenajear mañana, hoy viernes 6 de  diciembre. En todo caso, como tantos, nuestra supervivencia, el hacer de tripas corazón, el seguir esperando no se sabe a ciencia cierta qué pues se amplían las distancias entre lo prometido y lo ejercido, creciendo la desconfianza ante quienes hacen de la Política instrumento de  privilegio para intereses y docilidades al Sistema que no prioriza a los débiles, ahondando en desesperanza.

Ese tan cacareado consenso primigenio  fue forzado eludiendo las mayores  y permanece diluido , inexistente dándole protagonismo a las diferencias a lo sustancial: defensa de lo público, respeto a los derechos, servicios universales, bienestar y calidad, dignidad y techo y pan para todos.

Han pasado tres décadas y media. La han tocado a su conveniencia sin contar con aquellos en quienes reside la “ soberanía”, el demos. Han pactado (PPPSOE), el artículo 135 que facilita y prioriza la salvación de la deuda generada por la gestión empresarial y bancaria privada en detrimento de la garantía de lo público. En cambio no quieren abordar otros cambios necesarios permaneciendo anquilosados y fomentando el freno y la marcha atrás, descafeinando la cracia a la medida de oligarcas y autócratas permisibles y actores de opresión y corrupción.

Vulneran el espíritu, la letra de la Constitución ejerciendo una contrarreforma a su carta, chaqué y medida, haciendo de ella un corsé y restricciones cuando interesa.

Dicen argumentan y quieren convencernos desde el Gobierno no es momento de situar y profundizar en divisiones, de alentar soberanismos. Mientras, sigue perpetuándose el controlar legislativo y sus órganos con cuotas de color al servicio partidista inestable equilibrio según toque.  Proyectan y aplican el rodillo para amordazarnos protegiendo las libertades de otros. Desmontan las coberturas públicas, más desprotección y desagravio, menos con más y más con menos

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Y no celebrar no significa no seguir la senda del ¡  podemos cambiar la realidad actuando en ésta y creando nuevas condiciones !, no debilita el sentido de lucha y superación de lo que aprisiona a conveniencia. Un día más, una suma de momentos para entre otros, recordar el “ Somos” de José Antonio Labordeta y preparar la batería de palabras y colores, que luego y lo podamos contar, hay otros. Un día, para ser más  ciudadano si cabe..

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 Para quien o quienes lo celebran “que Vds., lo pasen bien, sin acritud y alegría ”

PEDRO GALLARDO, CIUDADANO